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jeylu
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LA LEY DE MURPHY
Siempre he dicho que no se puede fastidiar un viaje; he aquí la excepción que confirma la regla… os cuento el viajecito que me toco llevar este fin de semana:
Viaje de Valencia a Ibiza: Por cuestiones de un bautizo.
Empezaré diciendo que meses antes ya tenia todo concretado: barco, hotel… me iba con mi coche; todo muy hilado y confirmado (qué fin de semana me iba a pegar en Ibiza).
Itinerario:
Viernes – Valencia. Autopista a Denia, embarco mi coche en el ferry súper rápido a las 17 y pico y en un par de horas llegamos a Ibiza.
Domingo - Vuelta por la tarde/noche en el ferry rápido.
Y a falta de 1 día se va todo al garete:
La naviera me manda un mensaje al móvil diciéndome que quedan anulados todos los ferrys por cuestiones meteorológicas. Me indican que si queríamos teníamos pasaje para un barco que salía a las 11 de la noche, que era un buque más grande y por ello más estable, no siendo tan vulnerable como los ferrys rápidos a los temporales, y que llegaría sobre las 3 de la mañana a Ibiza. Madre mía!! Mirando la tele dicen que la mar esta muy picada, olas de 4 metros y mi cuñado que vive en Ibiza me dice que ni se nos ocurra por nada del mundo coger el barco… la única opción: El avión.
Joder!! Vaya precios que tienen!! ni qué decir de Iberia!!. Nos metemos en Internet y podemos sacar unos pasajes en Vueling bastante “asequibles” para mí, Lu y mi Jr., pero la salida es el sábado a la 1.40 de la madrugada. Ni un horario alternativo, así pues pillamos ese pasaje y que sea lo que Dios quiera!.
Sacando las tarjetas de embarque nos dicen que el nano tiene que presentar papeles (libro de familia o D.N.I) y no lo llevamos, ufff… la azafata muy amable pasa del tema y nos da las tarjetas.
Pasamos controles y esperamos en la terminal el avión, y joder viene con retraso, la peña no veas como estaba, gente joven y con ganas de fiesta. Un poco más y tienen que abrir el Duty Free por que el bar se queda sin existencias de alcohol (hicieron caja esa noche) y los de la limpieza no tuvieron que quitar el polvo sobre las cisternas del WC ya que la gente lo aspiró… no comment.
El avión al final aterriza y entonces embarcamos, y a eso de las 3:10 despegamos. Toda la gente loca que no veas y pidiendo cerveza y alcohol, y que quieren acción. Y muy corteses las azafatas les dicen: “alcohol no podemos servir pero no os preocupéis que os vais a divertir. Esperar a despegar que el viaje va a ser movido, peor que el dragón- khan”. Efectivamente, no veas qué vuelo, cuántas turbulencias… mi nano llorando, la gente gritando, un escándalo, 25 minutos de intensa emoción.
Finalmente aterrizamos en Ibiza y cogemos maletas. Coño!! si me han roto el carro del crío… la madre que los parió. Pues nada a hacer papeles para la denuncia. Mientras mi mujer hace esos papeles yo me voy a por un coche de alquiler. Hacemos cola y luego cuando ya lo tenemos le recordamos a la pava que nos atiende que también tenía contratada la silla para el niño, y me dice que no tienen. La hostia!! me pillan una y es una castaña, al final después de mucho pelear me dan una + - en condiciones pero no para el peso de mi hijo. Al final llegamos al hotel a las 6:30 de la mañana del Sábado.
No veas que fiesta… el crío llorando de sueño que tiene; nos acostamos y a las 10 el enano pide biberón. Almorzamos y nos damos una vuelta por San Antonio y luego a Ibiza a comer, siesta y a las 8 nos tenemos que pirar a la iglesia para el bautizo.
Bautizo y convite todo de luxe pero cuando tenemos que dar los regalos (Lu es la madrina) nos damos cuenta que los traíamos en una maleta y nos hemos dejado las llaves de la puta maleta, con lo cual tenemos que ir por patas al hotel para cogerlas y poder repartir los regalos… qué show!!. A las 2:30 nos vamos a acostar ya reventados de cansancio. El vuelo de vuelta sale a las 7:25 de la mañana y nos tendremos que levantar a las 5 para ir al aeropuerto y dejar el coche alquilado. Y facturar y pillar tarjetas de embarque… y pasar por los trámites del aeropuerto.
Menos mas que el vuelo sale a su hora y llegamos en 25 minutos a Valencia. Teniendo unas ganas de llegar a casa, ducharnos y meternos en la cama que no veas. Y sobre todo, una cura de sueño.
Esto es un fin de semana en Ibiza a groso modo de PM.
Me lo pensare de nuevo si quiero ir de fiesta a Ibiza, prefiero más relajado y con mucha más tranquilidad.
Siempre he dicho que no se puede fastidiar un viaje; he aquí la excepción que confirma la regla… os cuento el viajecito que me toco llevar este fin de semana:
Viaje de Valencia a Ibiza: Por cuestiones de un bautizo.
Empezaré diciendo que meses antes ya tenia todo concretado: barco, hotel… me iba con mi coche; todo muy hilado y confirmado (qué fin de semana me iba a pegar en Ibiza).
Itinerario:
Viernes – Valencia. Autopista a Denia, embarco mi coche en el ferry súper rápido a las 17 y pico y en un par de horas llegamos a Ibiza.
Domingo - Vuelta por la tarde/noche en el ferry rápido.
Y a falta de 1 día se va todo al garete:
La naviera me manda un mensaje al móvil diciéndome que quedan anulados todos los ferrys por cuestiones meteorológicas. Me indican que si queríamos teníamos pasaje para un barco que salía a las 11 de la noche, que era un buque más grande y por ello más estable, no siendo tan vulnerable como los ferrys rápidos a los temporales, y que llegaría sobre las 3 de la mañana a Ibiza. Madre mía!! Mirando la tele dicen que la mar esta muy picada, olas de 4 metros y mi cuñado que vive en Ibiza me dice que ni se nos ocurra por nada del mundo coger el barco… la única opción: El avión.
Joder!! Vaya precios que tienen!! ni qué decir de Iberia!!. Nos metemos en Internet y podemos sacar unos pasajes en Vueling bastante “asequibles” para mí, Lu y mi Jr., pero la salida es el sábado a la 1.40 de la madrugada. Ni un horario alternativo, así pues pillamos ese pasaje y que sea lo que Dios quiera!.
Sacando las tarjetas de embarque nos dicen que el nano tiene que presentar papeles (libro de familia o D.N.I) y no lo llevamos, ufff… la azafata muy amable pasa del tema y nos da las tarjetas.
Pasamos controles y esperamos en la terminal el avión, y joder viene con retraso, la peña no veas como estaba, gente joven y con ganas de fiesta. Un poco más y tienen que abrir el Duty Free por que el bar se queda sin existencias de alcohol (hicieron caja esa noche) y los de la limpieza no tuvieron que quitar el polvo sobre las cisternas del WC ya que la gente lo aspiró… no comment.
El avión al final aterriza y entonces embarcamos, y a eso de las 3:10 despegamos. Toda la gente loca que no veas y pidiendo cerveza y alcohol, y que quieren acción. Y muy corteses las azafatas les dicen: “alcohol no podemos servir pero no os preocupéis que os vais a divertir. Esperar a despegar que el viaje va a ser movido, peor que el dragón- khan”. Efectivamente, no veas qué vuelo, cuántas turbulencias… mi nano llorando, la gente gritando, un escándalo, 25 minutos de intensa emoción.
Finalmente aterrizamos en Ibiza y cogemos maletas. Coño!! si me han roto el carro del crío… la madre que los parió. Pues nada a hacer papeles para la denuncia. Mientras mi mujer hace esos papeles yo me voy a por un coche de alquiler. Hacemos cola y luego cuando ya lo tenemos le recordamos a la pava que nos atiende que también tenía contratada la silla para el niño, y me dice que no tienen. La hostia!! me pillan una y es una castaña, al final después de mucho pelear me dan una + - en condiciones pero no para el peso de mi hijo. Al final llegamos al hotel a las 6:30 de la mañana del Sábado.
No veas que fiesta… el crío llorando de sueño que tiene; nos acostamos y a las 10 el enano pide biberón. Almorzamos y nos damos una vuelta por San Antonio y luego a Ibiza a comer, siesta y a las 8 nos tenemos que pirar a la iglesia para el bautizo.
Bautizo y convite todo de luxe pero cuando tenemos que dar los regalos (Lu es la madrina) nos damos cuenta que los traíamos en una maleta y nos hemos dejado las llaves de la puta maleta, con lo cual tenemos que ir por patas al hotel para cogerlas y poder repartir los regalos… qué show!!. A las 2:30 nos vamos a acostar ya reventados de cansancio. El vuelo de vuelta sale a las 7:25 de la mañana y nos tendremos que levantar a las 5 para ir al aeropuerto y dejar el coche alquilado. Y facturar y pillar tarjetas de embarque… y pasar por los trámites del aeropuerto.
Menos mas que el vuelo sale a su hora y llegamos en 25 minutos a Valencia. Teniendo unas ganas de llegar a casa, ducharnos y meternos en la cama que no veas. Y sobre todo, una cura de sueño.
Esto es un fin de semana en Ibiza a groso modo de PM.
Me lo pensare de nuevo si quiero ir de fiesta a Ibiza, prefiero más relajado y con mucha más tranquilidad.