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Una interesante resolución nos llega hoy desde la Jefatura provincial de Tráfico de Madrid. Un conductor ha sido absuelto porque “los radares de tramo no discriminan al infractor cuando este circula en paralelo”. Con este criterio, cerca de 300.000 denuncias se habrían impuesto erróneamente.
Automovilistas Europeos Asociados ha comunicado hoy una sentencia favorable que podría traer cola en los próximos días. Esta organización de defensa de los conductores recurrió una multa interpuesta a un conductor que circulaba en paralelo en el momento en que las cámaras de un radar de tramo le 'cazaron'. Ahora, la Jefatura provincial de Trafico reconoce que la infracción “no constituye prueba concluyente para identificar de forma indudable al vehículo que excedió la velocidad”.
En la fotografía en cuestión, según dice la AEA, se aprecia sólo a un vehículo con la placa perfectamente reconocible circulando a unos 120 km/h en el tramo que une los kilómetros 57 y 49 de la AP-6 y que está limitado a 100 km/h, es decir, justo después del túnel de Guadarrama circulando en dirección Madrid. En cambio, al lado de el coche sancionado se distingue la sombra de otro que rodaba en paralelo y que no figuraba en la imagen que sirvió de base para la multa.
La sanción fijaba un importe de 100 euros con la posibilidad de descontarse un 50% para el infractor que apostó, en cambio, por recurrirla.
La AEA calcula que tanto la DGT como el Servei de Tránsit catalán, el gobierno Vasco y una decena de ayuntamientos, han multado de forma errónea a unos 300.000 conductores, bien por salirse de los márgenes legales establecidos o bien por que no se garantizase el correcto funcionamiento de los radares.
Automovilistas Europeos Asociados ha comunicado hoy una sentencia favorable que podría traer cola en los próximos días. Esta organización de defensa de los conductores recurrió una multa interpuesta a un conductor que circulaba en paralelo en el momento en que las cámaras de un radar de tramo le 'cazaron'. Ahora, la Jefatura provincial de Trafico reconoce que la infracción “no constituye prueba concluyente para identificar de forma indudable al vehículo que excedió la velocidad”.
En la fotografía en cuestión, según dice la AEA, se aprecia sólo a un vehículo con la placa perfectamente reconocible circulando a unos 120 km/h en el tramo que une los kilómetros 57 y 49 de la AP-6 y que está limitado a 100 km/h, es decir, justo después del túnel de Guadarrama circulando en dirección Madrid. En cambio, al lado de el coche sancionado se distingue la sombra de otro que rodaba en paralelo y que no figuraba en la imagen que sirvió de base para la multa.
La sanción fijaba un importe de 100 euros con la posibilidad de descontarse un 50% para el infractor que apostó, en cambio, por recurrirla.
La AEA calcula que tanto la DGT como el Servei de Tránsit catalán, el gobierno Vasco y una decena de ayuntamientos, han multado de forma errónea a unos 300.000 conductores, bien por salirse de los márgenes legales establecidos o bien por que no se garantizase el correcto funcionamiento de los radares.
