mochuelillo
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[h=1][/h] [h=3]Alonso sufre un problema eléctrico y no rueda en toda la sesión[/h] Pirelli ha traído neumáticos traseros nuevos para el GP de Alemania y la FIA ha exigido nuevos parámetros de presiones y caídas, pero el mayor cambio que esto ha traído a las clasificaciones es una ventaja de los Mercedes todavía mayor. Lewis Hamilton ha encabezado su primera tanda de entrenamientos de la temporada con dos décimas de ventaja sobre su compañero Rosberg y, atención, más de un segundo respecto al tercer clasificado, el Red Bull de Mark Webber. Fernando Alonso, último en la tabla, ha sufrido un problema eléctrico que le ha impedido rodar en su primer contacto con el nuevo calzado.
Nürburgring ha amanecido nublado, con un cielo color plata Mercedes que se ha trasladado también a la tabla de tiempos de la primera sesión de entrenamientos libres para el GP de Alemania. Lewis Hamilton ha encabezado las clasificaciones con un tiempo de 1'31"754, un dato que toma valor cuando lo comparamos con el 1'31"8 que Fernando Alonso marcó en esta misma sesión hace un par de años, cuando los coches aún montaban los difusores soplados. Estamos ante una machada de las flechas de Stuttgart, ya que Nico Rosberg le ha flanqueado a 219 milésimas, pero a partir de ahí encontramos un auténtico muro que nos lleva hasta Mark Webber, tercer clasificado, a más de un segundo de los chicos de Ross Brawn. La superioridad de los W04 ha sido especialmente abrumadora en el primer parcial, el más revirado.
Para el anecdotario, no hemos visto un solo problema con los neumáticos, la máxima prioridad para todo el paddock en estos momentos, aunque la inocuidad de los nuevos Pirelli estaba prácticamente garantizada por la menor agresividad del trazado respecto a Silverstone, las nuevas características de las gomas traseras con anillo de kevlar y, por si esto fuera poco, estrictas limitaciones en las presiones y las caídas de los neumáticos.
Siempre decimos que los resultados de los primeros entrenamientos libres sirven de relativamente poco, aunque en los últimos Grandes Premios se ha apreciado una notable correspondencia entre las tablas de viernes, sábado y domingo. Sin embargo, es cierto que los equipos han tenido que lidiar hoy con ajustes muy distintos de sus monoplazas, balances claramente alterados respecto a los de Silverstone y parámetros limitados para las caídas y las presiones de las gomas.
Los pilotos han trabajado más de lo normal en pista, pero aun así se mantiene la incertidumbre sobre las tandas largas y el verdadero potencial de cada coche en carrera. Sí se ha apreciado mayor estabilidad en el rendimiento del neumático, por lo que las estrategias podrían cambiar para el domingo, después de que Paul Hembery anunciara el pasado lunes que esperaba una carrera con tres detenciones en boxes de media.
Pero si alguien corona el apartado de incertidumbre, ése es Fernando Alonso, que apenas ha podido rodar hoy como consecuencia de un fallo eléctrico relacionado con el motor. El asturiano se ha quedado parado en el primer parcial durante su vuelta de instalación y, aunque ha podido volver a boxes e intentar rodar de nuevo, el equipo no había solventado su problema y ha vuelto a manifestarse en la bajada hacia la horquilla Dunlop. Felizmente para Alonso, ha podido volver a boxes en marchas largas, pero su equipo ya no ha tenido tiempo para solucionar la avería. Muy mal inicio de fin de semana para el segundo clasificado del Mundial, que ayer apelaba a la necesidad de entender los nuevos neumáticos antes que la competencia. Será difícil cumplir con este deseo, por más que Felipe Massa haya podido desarrollar su trabajo en pista sin mayores problemas.
Los McLaren han sido séptimo y décimo, lejos del cuarto lugar de Adrian Sutil con el Force India pero quizá mejor de lo que sería su ubicación habitual en los últimos Grandes Premios. Por su lado, los Toro Rosso parecen haber perdido el brillo mostrado en la última cita mundialista, pero es pronto para emitir ningún juicio definitivo, máxime cuando no sabemos el tipo de trabajo que han realizado hasta ahora.
Por Cristóbal Rosaleny
Nürburgring ha amanecido nublado, con un cielo color plata Mercedes que se ha trasladado también a la tabla de tiempos de la primera sesión de entrenamientos libres para el GP de Alemania. Lewis Hamilton ha encabezado las clasificaciones con un tiempo de 1'31"754, un dato que toma valor cuando lo comparamos con el 1'31"8 que Fernando Alonso marcó en esta misma sesión hace un par de años, cuando los coches aún montaban los difusores soplados. Estamos ante una machada de las flechas de Stuttgart, ya que Nico Rosberg le ha flanqueado a 219 milésimas, pero a partir de ahí encontramos un auténtico muro que nos lleva hasta Mark Webber, tercer clasificado, a más de un segundo de los chicos de Ross Brawn. La superioridad de los W04 ha sido especialmente abrumadora en el primer parcial, el más revirado.
Para el anecdotario, no hemos visto un solo problema con los neumáticos, la máxima prioridad para todo el paddock en estos momentos, aunque la inocuidad de los nuevos Pirelli estaba prácticamente garantizada por la menor agresividad del trazado respecto a Silverstone, las nuevas características de las gomas traseras con anillo de kevlar y, por si esto fuera poco, estrictas limitaciones en las presiones y las caídas de los neumáticos.
Siempre decimos que los resultados de los primeros entrenamientos libres sirven de relativamente poco, aunque en los últimos Grandes Premios se ha apreciado una notable correspondencia entre las tablas de viernes, sábado y domingo. Sin embargo, es cierto que los equipos han tenido que lidiar hoy con ajustes muy distintos de sus monoplazas, balances claramente alterados respecto a los de Silverstone y parámetros limitados para las caídas y las presiones de las gomas.
Los pilotos han trabajado más de lo normal en pista, pero aun así se mantiene la incertidumbre sobre las tandas largas y el verdadero potencial de cada coche en carrera. Sí se ha apreciado mayor estabilidad en el rendimiento del neumático, por lo que las estrategias podrían cambiar para el domingo, después de que Paul Hembery anunciara el pasado lunes que esperaba una carrera con tres detenciones en boxes de media.
Pero si alguien corona el apartado de incertidumbre, ése es Fernando Alonso, que apenas ha podido rodar hoy como consecuencia de un fallo eléctrico relacionado con el motor. El asturiano se ha quedado parado en el primer parcial durante su vuelta de instalación y, aunque ha podido volver a boxes e intentar rodar de nuevo, el equipo no había solventado su problema y ha vuelto a manifestarse en la bajada hacia la horquilla Dunlop. Felizmente para Alonso, ha podido volver a boxes en marchas largas, pero su equipo ya no ha tenido tiempo para solucionar la avería. Muy mal inicio de fin de semana para el segundo clasificado del Mundial, que ayer apelaba a la necesidad de entender los nuevos neumáticos antes que la competencia. Será difícil cumplir con este deseo, por más que Felipe Massa haya podido desarrollar su trabajo en pista sin mayores problemas.
Los McLaren han sido séptimo y décimo, lejos del cuarto lugar de Adrian Sutil con el Force India pero quizá mejor de lo que sería su ubicación habitual en los últimos Grandes Premios. Por su lado, los Toro Rosso parecen haber perdido el brillo mostrado en la última cita mundialista, pero es pronto para emitir ningún juicio definitivo, máxime cuando no sabemos el tipo de trabajo que han realizado hasta ahora.
Por Cristóbal Rosaleny
